Después de mi, el diluvio

Madame de Pompadour conoció a Luis XV cuando tenia solo 23 años,
fue su amante predilecta durante varios años y la "amiga necesaria"
y confidente hasta su muerte.
Propulsora de la cultura, favoreció el proyecto de la Enciclopedia de
Diderot, organizo en la corte todo tipo de espectáculos, protegió a los
escritores, aprendió a tocar la guitarra y superviso la construcción de
monumentos. Propicio el consumo del champán, se dice que la copa de
champán esta hecha sobre el molde de su perfecto seno.
Esta mujer, además, asesoraba al rey en cuestiones de Estado. Cuenta la
historia que consolando al rey luego de la derrota de Rossbach
le habría hecho esta observación: «Au reste, après nous, le déluge.»
(«Por lo demás...,después de nosotros, que caiga el Diluvio...»).
Y fue el diluvio!. Tres lustros después, durante el reinado de Luis XVI...
Murió a los 43 años, luego de una vida ajetreada, enferma de tuberculosis.

La historia no esta hecha por los monarcas, sino por esas mujeres que
saben como acompañarlos.

Por que gobernar un país es una cuestión de política, pero gobernar
sobre el corazón de un hombre es una cuestión de arte.

Los monarcas ya no existen....

Pero nosotras las mujeres, todavía reinamos.


(Este post esta dedicado a Blanca Garbarini, mi bisabuela y la gran
compañera de Ernesto Aversa)